“En uno de los lugares más áridos minerales y planetarios de la tierra, las mañanas ofrecen una alegría salvaje y amarga, ferozmente analítica y estructural: las noches son morbosas y los olivos brillantes. La brisa matinal dibuja sonrisas de pequeñas olas felices a las aguas. Por la tarde y ya menudo, como consecuencia de los islotes que hacen de Portlligat una especie de lago, el agua está tan tranquila que refleja los dramas del cielo crepuscular´´
SALVADOR DALÍ

